¿Qué hay detrás de explosivo dejado adentro de un restaurante en Palmira, Valle del Cauca? Esto informó la comandante de la Policía de la región

Con estas palabras, la comandante de la Policía Valle, coronel Sandra Liliana Rodríguez, señaló que siguen las investigaciones por el explosivo dejado en este establecimiento comercial. 

"Es allí que la Policía Nacional acude de manera inmediata con sus unidades de antiexplosivos para verificar el material al interior de la misma, este carece de cualquier capacidad explosiva”.

El restaurante está ubicado en la calle 42 con carrera 32, de Palmira. 

Las autoridades encontraron una nota junto al explosivo que por fortuna fue intervenido por el equipo de la Policía Nacional. La amenaza es parte de la investigación. Se busca determinar el grado de la amenaza. Se investiga si es una retaliación contra los propietarios del restaurante o si era hacia alguna persona que frecuenta el lugar.

En junio pasado, un hombre dejó abandonado un vehículo en la carrera Primera, entre calles 32 y 34. Es una zona altamente transitada en el nororiente de Cali. 

De acuerdo con la Policía Metropolitana de la ciudad, el caso sucedió a eso del mediodía del 13 de junio.

Lo que prendió las alarmas no fue solo que el conductor dejara el carro en medio de la calzada, sino su actitud sospechosa de haber salido corriendo. Eso hizo que la comunidad diera aviso a las autoridades.

La Policía también indicó que desde el momento en que se conoció la alerta empezó la aplicación de protocolos de seguridad con un equipo de antiexplosivos para descartar si era un caso de carro bomba en esta zona de la capital del Valle del Cauca, donde el pasado 10 de junio, una serie de atentados en el sur y en el oriente, así como en el vecino municipio de Jamundí dejó cinco muertos y más de 80 heridos. 

Por esa zona transita una de las rutas del Masivo Integrado de Occidente (MIO), por lo que pasajeros de uno de los buses fue evacuado ante el temor por alguna explosión.

A la 1:54 de la tarde de aquel viernes 13 de junio, la Policía informó que técnicos de la fuerza pública reventaron el vidrio de una de las ventanas para verificar el contenido. 

A las 2 de la tarde, la Policía Metropolitana de Cali informó que se descartaba alguna clase de explosivos. La carrera Primera en ese punto fue abierta nuevamente al tráfico vehicular.

Pero, entre ciudadanos, transeúntes, conductores y empleados de locales comerciales en el zona, quedaron con susto, tras esta situación que duró dos horas.

La ciudad ha estado bajo zozobra desde la escalada terrorista, perpetrada por disidencias que están bajo el mando de 'Iván Mordisco' en Valle, Cauca y también en Nariño.

En ese mes de junio, Cali vivió otras amenazas de bomba que por fortuna resultaron en falsa alarma. La situación de temor se había incrementado por los atentados del pasado 10 de junio en Valle y Cauca.